domingo, 15 de julio de 2007

Uruguay: La pelea por la tierra



La lucha de los cañeros de Bella Union reflejada en el documental Yo pregunto a los presentes, Cine Insurgente


Justicia, tierra y libertad. Hace más de 40 años, los “peludos” (como se conoce a los zafreros del norte uruguayo) continúan con la lucha cotidiana para conseguir una parcela de tierra para poder subsistir. Esta lucha de los cañeros de Bella Union se volcó en el documental Yo pregunto a los presentes, producción del grupo de Cine Insurgente y dirigido por Alejandra Guzzo.

Uruguay cuenta como principal ingreso económico las divisas producto de la actividad agropecuaria. De 186 mil km2 de territorio, el 87 por ciento de esa tierra es cultivable y el 75 por ciento de ese suelo fértil se encuentra en pocas manos. En Bella Unión, departamento de Artigas, el 90 por ciento de las tierras se encuentra en manos privadas y solo el 10 por ciento restante es terreno fiscal. Dentro de ese terreno fiscal se encuentra el predio Colonia España, ocupado el 15 de enero del 2006 por las organizaciones Unión de Trabajadores Azucareros de Artigas (UTAA), el Sindicato de Obreros de la empresa azucarera Calnu (SOCA) y la Asociación de Pequeños Productores y Asalariados Rurales de Bella Unión (Apaarbu). Frente a esta realidad, que refleja la descarada y voraz monopolización de la principal fuente de recursos para miles de familias uruguayas, la película plantea una interrogante: ¿De quién es realmente la tierra en el Uruguay de hoy?.

Desde los años 60 este movimiento de resistencia era liderado por Raúl Sendic, líder campesino y posterior fundador del MLN-Tupamaros. Hoy los hijos de esos mismos “peludos”, que hicieron carne la consigna zapatista de "tierra para quien la trabaja", son los que se ven obligados continuar con la lucha que gestaron sus padres, a ocupar terrenos en desusos para trabajar la tierra y darle un fin social. Al mismo tiempo persiguen como objetivo acabar con la extranjerización de las tierras y fomentar la actividad agropecuaria para generar el retorno de compañeros y compañeras que se vieron forzados a dejar el campo para buscar bienestar en las ciudades. Los trabajadores del azúcar de Bella Unión plantean que es necesario una reestructuración del sistema de reparto de tierras, acompañado por una política social que estimule los emprendimientos cooperativos. Política que hoy en día no existe dentro del gobierno “progresista” uruguayo, que solo busca la salida ofreciendo medidas paliativas momentáneas, pero no a largo plazo.

Algunos compañeros de lucha, que anteriormente peleaban codo a codo por los derechos de los campesinos y hoy se encuentran enquistados en el gobierno uruguayo, se han olvidado de una frase que define a la resistencia de los “peludos” de Bella Unión: "La tierra no se mendiga; se gestiona, y si no se da, se toma".


Latinoamérica esta viviendo una etapa socio política fundamental para despegar del modelo económico endiosado por el consenso de Washington. El biocumbustible se perfila como el nuevo caballo de batalla del neoliberalismo mundial, que ve a Sudamérica como un gran sembradío para alimentar su tenaz apetito energético. Esta nueva concepción de utilidad de la tierra intenta borrar el verdadero fin social que posee: dar trabajo y alimentar al hombre. Este ejemplo de los hermanos uruguayos, como también el Movimiento de los Trabajadores Rurales sin Tierra de Brasil (MST), resaltan lo que realmente es importante: el hombre no es dueño de la tierra, la tierra es dueña del hombre.


E.Alvarez

1 comentario:

Unknown dijo...

cada vez que leo o me entero de este tipo de luchas y veo que todavia no hay comentarios, digo donde estamos? participemos, comentemos, hablemos, expresemos, tomemos, luchemos, salut hermanos uruguayos, dignidad, humildad y trabajo.